martes, 10 de febrero de 2009

Pitas, pitas...

Ya conocéis a mi amiga Isabela. Este es su corral y sus gallinas. Elisabet se lo pasa muy bien echándoles de comer.

Hoy les hemos echado maíz del huerto de mi suegro, así que imaginar los huevos tan ricos que dan.




Pablo también se entretiene mucho con ellas. Cuando hacía mejor tiempo se pasaba muchos ratos en el corral, observándolas y jugando con ellas.





5 comentarios:

Anónimo dijo...

y no están en jaulas!

qué bien!

a los míos también les gustan las gallinas de su abuelo, jeje

1beso

María Cristina dijo...

A mi también me encanta echar de comer a las gallinas ¡se lo zampan todo! La pena es que por aqui no tenemos...
Un beso guapa

Mari Cruz Isasi dijo...

Cuentan que luego hay que buscar los nidales. Hay que dejarles un huevo para que no busquen otro nuevo y así encontrarlos.

Rafael dijo...

Pásate a recoger un mimo por el reino de los Hechiceros...

amigos homeschoolers dijo...

¡Que chulo!
Yo de pequeña le daba de comer a las gallinas de mi abuela y mola mucho.